El auto que tantos dolores de cabeza le dio a Omar Martínez tiene fecha de vencimiento. Después de la carrera de Olavarría, el entrerriano estrenará un nuevo Ford y archivará el vehículo que, entre otras cosas, le impidió clasificar a la Copa de Oro. Será nada menos que en Paraná.
Borrón y cuenta nueva. Eso es lo que quiere hacer Omar Martínez tras una temporada frustrante, en la que ni siquiera pudo aprovechar la segunda vida que le dio la ACTC con la implementación de la Copa de Oro a mediado del certamen. Como primera medida, el Gurí cortó por lo sano: le hizo la cruz al Ford que comanda actualmente y que en principio fue responsable máximo del fracaso más grande del entrerriano dentro del TC. Según Cristian Ávila, Director del equipo de Martínez, la resolución ya está tomada. La idea del mecánico y sobre todo del piloto, es poner en pista a una nueva unidad nada menos que en la 14ta fecha de la categoría, que en un primer momento le correspondía a Chaco, pero que ahora se correrá en Paraná. Después de carrera de Olavarría, está previsto desarrollar un ensayo comparativo entre los dos autos, pero es casi un hecho que el entrerriano estrenará el flamante Ford en el autodromo que mejor conoce y donde buscará revancha tras la última victoria en pista, que se desvaneció en la verificación técnica a raíz de irregularidades en su motor. ¿Podrá el Gurí cortar una racha de 42 finales sin triunfos con un 0KM? Sólo el tiempo lo dirá
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